El Barcelona se proclamó campeón de la Copa del Rey en una final hermosa, vibrante y polémica que fue una oda a la competición y a la enorme dimensión de los dos grandes de España. Del látigo azulgrana a la épica blanca para que Koundé, en la antesala de la tanda de penaltis, facturará la alegría para los de Flick.
La primera mitad, ha tenido un claro dominador: el FC Barcelona. Los de Hansi Flick, muy dominadores y probando a lo que iba a jugar el Real Madrid, ha iniciado su fútbol como mejor sabe, dando pases de forma directa hacia la portería. Aún así, los culés no han tenido muchos acercamientos de cara al arco de Courtois. Y esque hasta el minuto 25, Koundé tuvo la primera del partido en un remate sencillo que despejó el belga. Los catalanes, aparte de jugar muy directo al fútbol, su presión era contundente y el Madrid, no podía salir con el balón en sus pies. En el minuto 28, después de un corte sublime de Cubarsí, Pedri le dió un balón en una distancia espectacular, el cual Lamine hizo lo que mejor sabe, asistir a un Pedri, que encontró en el arco y coló la pelota en la mismísima escuadra. Durante lo que restaba de primera mitad era el mismo planteamiento de ambos técnicos. Olmo consiguió un palo desde el córner, acciones muy polémicas no pitadas como tarjetas y muchas más acciones durante los primeros 45 minutos de la Final. Cuando todo iba a finalizar, el Madrid apretó y marcó un gol y provocó un penalti, por desgracia para ellos, las dos acciones en fuera de juego.
Fuente: Marca
SEGUNDA PARTE:
La segunda mitad, es de absolutos locos, todo empezó a cambiar a favor del Madrid, desde la entrada en el terreno de juego de Kylian Mbappé, el cual, se desató y durante los 30 minutos siguientes estaba atosigando prácticamente el solo la portería defendida por el polaco Szczesny. Durante ese gran tramo del segundo tiempo, el propio Kylian marcó un golazo de falta que igualaría de forma momentánea la final. Más tarde cuando los blancos más acosaban el área contraria, el francés Tchouameni, remató a placer un centro exquisito de Arda Güler, para poner el 1-2 que parecía decantarse para los merengues. Pero si este FC Barcelona ha demostrado durante esta temporada, es las ganas y el hambre de títulos, Lamine con un pase clínico y medido para Ferran pudieron igualar la contienda, con un golazo del ex jugador del Valencia. Con este resultado todo se decidiría en la prórroga.
PRÓRROGA:
En la prórroga no pasaron grandes cosas, el cansancio acumulado de ambos conjuntos se hacia notar y estaba afectando al rendimiento del partido. Donde todo se decidiría en los minutos finales, cuando un pase erróneo de Luka Modric, lo aprovechó Koundé para desde su casa marcar el gol que le daría al FC Barcelona el segundo título de la era Flick. El Real Madrid de Ancelotti, muy desquiciado y poco acostumbrado a encontrarse con finales pérdidas, tuvo que controlar a Rüdiger, Vinicius… los cuáles no aceptaron la derrota y este último se fue con sanción.
Fuente: Sport