Son una máquina de hacer goles y asfixiar a sus rivales hasta que apenas les quedan fuerzas para regresar a casa. El Deportivo se ha convertido en el líder indiscutible de la 1ª RFEF y principal candidato al ascenso en apenas dos meses. Se llegó a criticar a Idiákez y Lucas Pérez en Coruña, tachándolos de poco comprometidos, pero las siete victorias consecutivas han disipado cualquier duda que pudiese existir.
Los gallegos van de récord en récord y tiro porque me toca. No solo son registros puramente deportivos como las asistencias y goles de su capitán, sino a nivel de afluencia a Riazor. La afición blanquiazul siempre ha destacado por su compromiso, independientemente de la categoría y situación del equipo, así que imaginen cómo no se van a subir al barco cuando va viento en popa a toda vela.
Lo más difícil quizás no es llegar, sino mantenerse y el Deportivo sabe mucho de ello. Han rozado el ascenso con la punta de sus dedos en múltiples ocasiones en las últimas temporadas, siempre con el mismo desenlace: llantos y penurias mirando la felicidad ajena. El domingo, en Tarragona, tienen una cita con la historia pese a que todavía queden muchas jornadas por delante.
Actualmente, el Deportivo acumula siete victorias consecutivas, habiendo promocionado todos los equipos que han logrado algo similar en la corta historia de 1ª RFEF. Sin embargo, es el Racing de Santander en la 21/22 quién ostenta el mayor número de triunfos seguidos con ocho. De salir airosos los blanquiazules de las murallas tarraconenses igualarán la gesta cántabra.
Aquella temporada el Racing ascendió con varias jornadas de adelanto, imponiéndose a clubes de la talla del Ferrol, Logroñes, Cultural…y el propio Deportivo de la Coruña. Los coruñeses se descolgaron de los santanderinos, precisamente, en esa racha tan gloriosa que firmaron los de Guillermo Fernández Romo. Ahora, dos temporadas después, sueñan con emular a ese equipo que tanto envidiaron desde la distancia.
El rival es inmejorable para tocar la gloria, pues se trata del segundo clasificado, de su inminente perseguidor. No solo está en juego un récord que, al fin y al cabo, quedará a merced del polvo con el paso de los años, sino el liderato. Una victoria deportivista propulsa a los de Idiákez hacia la Liga Hypermotion, mientras que una derrota les devuelve a la tierra.
El empate podría darle la corona momentánea a la Ponferradina, algo que solo la igualdad del grupo puede explicar. Los bercianos viajan el sábado a Vigo en el otro partido de la jornada con el objetivo de dejar los deberes hechos antes que sus rivales directos. Sea como sea la tabla el lunes por la mañana, la temporada 23/24 será recordada por todos los aficionados por la exacerbada igualdad entre conjuntos y el resurgir entre sus cenizas del Deportivo.
Martín Benavides Otero @martinnnn_-16
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