La S.D. Compostela y el C.D. Tenerife protagonizaron uno de los primeros partidos de la jornada copera de Miércoles. Los gallegos llegaban a copa luego de vencer por 4-1 al Valladolid B, por otra parte, los visitantes venían de perder ante el Elche en liga.
El partido comenzaba con una actitud bastante ofensiva de los locales. Dicha intensidad, les permitió ser los primeros en tener una ocasión de peligro. En el minuto 4’, Parapar, sacaría un gran disparo que Tomeu Nadal detendría sin muchas complicaciones. A medida que avanzaba el tiempo, la confianza del Tenerife aumentaba y poco a poco reflejaban su favoritismo en el terreno de juego. En el minuto 10’ los blanquiazules, hoy rosados, tuvieron su primera oportunidad. Un grandísimo centro de Elady al segundo palo sería rematado y anotado por Ángel; el veterano delantero utilizaría su experiencia para anteponerse al defensa y poder rematar con comodidad. Nada más recibir este golpe, el Compostela cogería las riendas del encuentro. Un Tenerife conformista, sería una de las principales razones por las que los locales gozaron de varias ocasiones. Los canarios, a pesar de su escasa táctica ofensiva, supieron cerrar bien atrás las filas impidiendo que los Esedé culminaran sus jugadas. Después de dos minutos de descuento, el árbitro ponía fin a una primera parte mascarada por la efectividad chicharrera y la mala definición gallega.
En la segunda mitad, ambos equipos saldrían con las ideas claras. La Sociedad Deportiva, sin nada que perder, saldría en busca de la épica. Tanto fue así que, nada más empezar tendrían su ocasión más clara de todo el encuentro. Matos, luego de una gran jugada individual, lanzaría a puerta, no obstante, Tomeu Nadal conseguiría tocar el balón, el cual se quedaría botando hasta ser despejado bajo los palos por Nacho Mar. Los visitantes, luego de varios cambios, se mostrarían algo más activos arriba. Un ejemplo de ello fue un disparo cruzado de Teto, posteriormente atajado por Borja Rey. El tiempo corría y la intensidad del partido disminuyó, sin embargo, los locales seguían poseyendo la batuta del partido. El club canario no paró de recibir avisos por parte de los rivales que no perdían la fe en empatar. Rozando el final, el Compostela tuvo su última ocasión clara, Jordan Domínguez le pegaría al balón, para su lamento este saldría mordido y se marcharía por encima del travesaño. Tras seis minutos de alargue el árbitro ponía fin al encuentro.
El Tenerife gana y pasa de ronda en la competición, por otro lado, al Compostela se le acaba el sueño de la copa pero, 14 años después, han competido dejándose uñas y dientes en copa cayendo con honor ante su afición.
Hugo Pérez de la Guardia, @hugopdlg2005
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