El internacional argentino se despidió ayer de toda la afición rojiblanca en su último partido en el Metropolitano. El club, comunica que no tiene ofertas por el "10".
Fuente: DAZN
Ángel Correa se despidió ayer de toda la afición del Atlético de Madrid. Y lo hizo como mejor sabe hacerlo, con un gol saliendo desde el banquillo. Cuando acabó el partido, el argentino se fue hacia el fondo sur, donde recibió el cariño de su gente. Unos minutos después, volvió al terreno de juego, con una camiseta retro y una bufanda, y dio una vuelta de honor mientras la grada coreaba su nombre, una vez más. Antes de entrar en el túnel de vestuarios le esperaban los capitanes del club: Koke, Oblak y Giménez, acompañados de Juan Musso. Por si esto fuera poco, el propio jugador reconocía en sus redes sociales que ante el Real Betis, fue su último partido en casa: "Hoy viví mi último partido en casa con esta camiseta que tanto amo. No fue un día más, fue un cúmulo de recuerdos, emociones y gratitud. Gracias al club, a mis compañeros y a esta afición increíble que siempre me hizo sentir uno más. Me llevo cada aplauso, cada ovación y cada momento en el corazón. Siempre estaré agradecido por todo lo que viví en el Atleti. ¡Gracias por tanto!".
Pero no todo estaba tan claro como parecía. Esta mañana, el club emitía un comunicado en el que reconoce que "Correa tiene contrato hasta el 30 de junio de 2026, y la entidad no ha recibido ofertas para un traspaso". A su vez, han aprovechado para poner en valor la carrera del futbolista en la capital española: "Ángel Correa llegó al Atlético de Madrid en diciembre de 2014, y desde entonces ha disputado 465 partidos oficiales, convirtiéndose en el sexto jugador con más partidos en la historia del club. Además, en estos partidos ha logrado 88 goles", afirmaba el comunicado.
Pese a este comunicado, ya son varias las semanas en las que se viene hablando del interés de Tigres en contar con el rosarino, que si nada se tuerce, emprenderá un nuevo reto profesional en la liga mexicana.
Fuente: El Horizonte