Carrera hacia el gol

Con Mikel Oyarzabal fuera por lesión y la delantera en cuadro, la Real mira hacia Zubieta. Allí surge Gorka Carrera, delantero del Sanse con hambre, velocidad e instinto puro. No viene a probar: viene a marcar la diferencia.

Cuando el capitán dice basta 

A veces el fútbol es cruel y no avisa; otras veces avisa… y no escuchamos. A Mikel Oyarzabal lo hemos exprimido hasta la última gota. Como si fuese una naranja eterna. 

13 jornadas sin descanso. 

10 partidos completos jugando los 90 minutos.

3 parones de selecciones devorados sin rechistar

Partidos totalmente irrelevantes jugados como si fueran finales (hola, Turquía).

El capitán tirando del carro mientras otros miraban hacia otro lado. Pero por muy sobrehumano que parezca, Mikel es humano. Y cuando fuerzas a un Ferrari a correr como un tractor, tarde o temprano el motor dice basta.

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Oyarzabal, abatido, tras la eliminación copera ante el Real Madrid C.F. | @mikel10oyar 

La Real Sociedad lo ha confirmado con el parte médico más temido: lesión muscular en los isquiotibiales de la pierna izquierda. 

Noticias de Gipuzkoa apunta a 3 semanas KO. No estuvo ante Villarreal C.F. ni estará frente al Reus C.F.R., Deportivo Alavés, Girona F.C. … y quizá tampoco el 20 de diciembre ante el Levante UD . Un cierre de año sin el capitán es como una tamborrada sin tambores. 

La delantera… en llamas

Como si el destino quisiera echarnos más leña al fuego, las malas noticias llegan en cascada:

Oskarsson: desaparecido desde agosto, recaída incluída. Lejos de reaparecer.
Karrikaburu: ayer completó su primer entrenamiento con el grupo. Hay que ir con calma con él.
Oyarzabal: 3 semanas KO.

Con la enfermería llena, la Real se plantó ante el Villarreal C.F. con Umar Sadiq como referencia ofensiva. Fue un naufragio absoluto: descoordinado, incapaz de aguantar un balón. No sé impuso ni de espaldas, ni al espacio. Llegaba tarde a cada pase filtrado, huía del esférico, y el centro del área parecía quemarle. Un 9 puro lejos del área, de chiste. Basta ya de darle oportunidades al tio que se sigue riendo de nuestro escudo en la cara. 

Guedes de 9: parche sí, solución no
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Guedes desata la alegría tras marcar ante C.A. Osasuna. | @realsociedad

Sí, Goçalo Guedes puede actuar de 9. Ya lo hizo con Valencia C.F., cuando Maxi Gomez cayó lesionado. También lo hizo ante el Villarreal C.F. el sábado, para cubrir los huecos que dejaba Sadiq. Es un falso 9 eléctrico, travieso, chisposo. Una pesadilla para defensas agotados y entrenadores sin ibuprofeno.

Pero todo tiene un precio. Si juega por dentro, la banda queda huérfana. Pierdes velocidad, regate, desborde, cambio de ritmo. Pierdes el veneno. Y ahora que por fin tenemos dos cuchillos afilados por fuera (Barrene y Guedes)… sería un crimen desarmarlos.

Además, colgar balones a un falso 9 es como intentar comer sopa con un tenedor: se puede… pero es absurdo.

La hora de Gorka Carrera

Entre la niebla, aparece él. Gorka Carrera.

Hace un año estaba enterrado en la Real Sociedad C, sin minutos ni cuando faltaba el delantero titular. A punto de irse. Invisible. Sin escaparate. Sin eco.

Y hoy…

• Es el jugador del Sanse que más genera en ataque.

• Lleva 6 goles y 3 asistencias en 15 jornadas de LaLiga Hypermotion.

• Marca 1 gol cada 4 tiros.

• Suma casi 50 toques en área rival.

Huele el área como un sabueso hambriento. Gorka no toca puertas: las atraviesa como un meteorito.

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Gorka Carrera celebra su segundo gol en el encuentro Real Sociedad B Vs C.F. Andorra

Sus movimientos son puro instinto de 9: ataque al primer palo, diagonales venenosas, lectura de espacios. Como un delantero veterano. La mitad de sus goles nacen tras centros laterales: exactamente lo que necesita la Real cuando juega por fuera.

Sergio Francisco lo ha premiado subiéndolo con los mayores. Zubieta sonríe. Con minutos ante el Villarreal C.F. Y él está listo.

Pero que quede grabado a fuego: Si le subes, que sea para jugar. Para morder. Para romper. Para cambiar partidos. No para meterle 10 minutos a la desesperada cuando todo está perdido. Eso no lo merece nadie, y desde luego, no lo merece él. Una pieza de gala se estrena en un 11 de gala.

Sin Oyarzabal, con la delantera hecha cenizas y el gol chamuscado, es la hora de Gorka Carrera. La chispa capaz de encender el incendio. El chaval sube desde Zubieta con el colmillo afilado, oliendo sangre y... esperando al Reus F.C.R. para hincarle el diente en la yugular.